Cómo sobrevivir a los reencuentros navideños con amigos del pasado - Robando Tu Tiempo

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27 diciembre 2024

Cómo sobrevivir a los reencuentros navideños con amigos del pasado

La Navidad, con sus luces, villancicos y tradiciones, también trae consigo algo que puede generar sensaciones encontradas: los reencuentros con amigos del pasado. Compañeros del instituto, colegas de un antiguo trabajo o integrantes de un grupo de amigos ya extinto suelen reaparecer en nuestras vidas durante estas fechas. Aunque para algunos estas reuniones son motivo de alegría, para otros pueden convertirse en momentos de tensión o incomodidad. ¿Por qué ocurre esto y cómo podemos gestionarlo de manera positiva?


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Reencuentros de Navidad: cómo convertirlos en una experiencia positiva

El impacto de la comparación social

Según la teoría de comparación de Festinger, las personas tienden a evaluarse a sí mismas comparándose con otros. Esto es especialmente notable en reuniones con individuos con quienes compartimos un pasado común, ya que inconscientemente nos medimos en términos de éxitos, fracasos y elecciones de vida. Sin embargo, lo más interesante es que no son necesariamente las personas que menos han conseguido en términos de dinero, familia o carrera quienes sufren más en estos encuentros, sino aquellas con una baja autoestima.

“Las personas con baja autoestima tienden a salir de estas reuniones con la sensación de que les va peor que a los demás, aunque eso no sea cierto”, explica la psicóloga María Delblanch. Pero esto no significa que estos encuentros sean siempre negativos. De hecho, si se gestionan adecuadamente, pueden ser una oportunidad para reforzar nuestra autoestima y afianzar nuestra identidad.

Por otro lado, también es importante recordar que no siempre es necesario asistir a estos encuentros. Si no te sientes cómodo o no te aportan nada positivo, está claro que la elección es no acudir. No hay que darle tantas vueltas. En el caso de reuniones familiares, es comprensible que se reflexione más antes de tomar una decisión, pero si no es familia y no te encuentras a gusto, prioriza tu bienestar. 


Estrategias para afrontar los reencuentros navideños

Si estas reuniones te generan ansiedad o malestar, aquí tienes algunas recomendaciones para sobrellevarlas de la mejor manera:

  1. Ve con expectativas claras: No esperes que todos los encuentros sean como en el pasado ni que surjan conexiones profundas. Acércate con una mentalidad abierta, pero realista.

  2. Reconoce la comparación social: Es normal compararse con los demás, pero también es importante identificar cómo te hace sentir y poner límites si las emociones negativas comienzan a dominar. Esto puede ser especialmente difícil en aspectos como el crecimiento económico, la compra de una casa o la expansión de la familia. Si sientes que estás estancado y los demás avanzan, trata de evitar caer en una espiral de autocrítica. Además, cada uno tiene su propio ritmo, y no siempre lo que brilla en los demás es oro. Lo que parece éxito desde fuera puede no ser tan perfecto en la realidad, por lo que es fundamental no idealizar las vidas de los demás.

  3. Céntrate en tus fortalezas: En lugar de pensar en lo que te falta, valora tus logros y aspectos positivos. Practicar la gratitud puede ayudarte a mantener una perspectiva equilibrada.

  4. Cuida tu bienestar previo al encuentro: Dormir bien, hacer ejercicio o incluso meditar pueden prepararte emocionalmente para enfrentar el evento con energía y confianza.

  5. Busca aliados en el grupo: Identifica a una o dos personas con quienes te sientas cómodo para compartir momentos agradables sin sentirte abrumado por la dinámica del grupo.

  6. Establece límites emocionales: Si la conversación se torna demasiado competitiva o te hace sentir incómodo, cambia de tema o toma una pausa. Es importante proteger tu bienestar emocional.


Aprovecha el lado positivo

Aunque pueden ser desafiantes, estos encuentros también tienen su lado bueno. Nos permiten reflexionar sobre cómo hemos cambiado y crecido desde aquellos tiempos. También son una oportunidad para reconectar con personas que en su momento fueron importantes y para recordar que, aunque nuestras vidas hayan tomado caminos diferentes, esas experiencias compartidas son parte de lo que somos hoy.

En lugar de evitar estas reuniones, considera que pueden ser una oportunidad para redescubrir aspectos de ti mismo y reforzar tu autoestima. Al final, la clave está en no enfocarse tanto en compararse, sino en celebrar las conexiones humanas y los momentos de alegría que la Navidad puede traer.

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